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Botijos y tebeos
Me acuerdo de cómo quitaba la sed, en las tardes tórridas del verano, el agua fresquita y terrosa de los botijos.
Me acuerdo del que vivía en la alcantarilla, frente a la portería, en las viñetas de 13 rue del Percebe.
Me has hecho recordar cosas de cuando era pequeño...la 13 rue del Percebe, junto el TBO y el Mortadelo, el mejor tebeo que se haya hecho en el país, y el que acompañaba mis meriendas de verano...
ResponderEliminarUn saludo Elías
Yo guardo como un tesoro esos tebeos DDT, TBO, TIO VIVO, algunos ejemplares de Jorge y Fernando, PULGARCITO...¡Qué recuerdos!.
ResponderEliminarQuerido Xavi, querida Su:
ResponderEliminarYo los consevo en la memoria.
Por eso los escribo antes de olvidarlos.
Abrazos para los dos.
Recuerdo que cuando era pequeño, todos los años al comenzar el verano, mi madre nos compraba a mi hermana y a mí sendos botijos, "tamaño infantil", manejables para nuestras manos niñas. Y no sé por qué misteriosa razón, todos los años acababan haciéndose añicos al llegar septiembre... Decían que para quitar del agua el sabor a barro había que hechar unas gotas de anís la primera vez que se llenaba: así lo hacía mi padre. No sé si sería aquello o qué, pero agua como aquel nunca más probamos...
ResponderEliminarEn cuanto a la 13 Rue del Percebe, junto a Mortadelo, también era de mis historietas favoritas.
"Mi infancia son recuerdos de patio y de tebeo".
Un abrazo.
En mi casa, Antonio, también se hacía así; se "curaban" con anís.
ResponderEliminarY aquel agua sí que estaba rica; nada que ver con éstas de ahora que lo menos que aprecen es agua.
En cuanto a los botijos "chiquininos", alguno rompí también de pequeño, seguramente distraído por la lectura de los tebeos.
Un abrazo.