Eso de que "A todo cerdo..." pues
no sé yo; porque ya han pasado como a lo tonto dos meses desde San Martín y yo sigo viendo muchos gorrinos de dos patas por las
calles hozando a sus anchas en nuestros asuntos, refocilándose a modo en sus mezquinas zahúrdas morales, emporcándonos la vida con sus pezuñas y hocicos.
Aunque la foto es mía, no puedo por menos que agradecérsela a mi queridísimo "Tosansan" (Tomás Sánchez Santiago), quien, sabedor de mi peculiar querencia por estas cosas de provincias y haciendo gala de su bonhomía y de su quehacer de anfitrión, me guió hasta este insólito, y recóndito, escaparate porcino mientras paseábamos por el Barrio Húmedo de León después -¿o fue antes?- de dar buena cuenta de ricas viandas de la tierra regadas sin recato alguno con sus no menos excelentes caldos.
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