C.
Inicial de dos de las locuciones que nos asestamos con más frecuencia con ánimo
ofensivo y sin distinción de sexo: coño y cabrón.
También presente en otros términos más
dúctiles y corteses, casi cursis: a modo de ejemplo, véanse en cualquier otro
centón más casquivano o chabacano, o canónico… aquí no busquéis porque no
están, las clásicas y ya arcaicas voces para expresar asombro y estupefacción
de caramba, cáspita, córcholis y caracoles.
Sirve también como inicial de "Camino" (¡qué casualidad!) (guiño cómplice, ya de regreso).
ResponderEliminarAbrazo.