Comentario
de un nativo africano, acompañante y servidor de David Livingstone durante sus
exploraciones por el continente negro, la primera vez que contempló el mar: 
-¡Qué país tan raro: todo se vuelve agua!
-¡Qué país tan raro: todo se vuelve agua!
 * * * * * 
El
mar, la mar: agua andrógina. 
 

 













 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
