Hoy, 24 de abril, y según el Calendario Zaragozano, festividad de Ss. Fidel de Sigmaringen, Gregorio, Eusebio, Leoncio y Sabas, mártires, mi amigo Marino González Montero cumple años.
Titantos, como suele decirse con cierta coquetería.
Es así, tal como lo veis en la foto: seguramente aquí está riéndose de algún chiste que le acaban de contar, o está a punto de contar uno él mismo y ya está abriendo boca a la risa y la amistad.
Dejando aparte, claro, que es también un magnífico escritor -mejor de lo que él mismo se cree- y un editor exquisito.
Mi manera de felicitarle es colgar aquí dos pequeños "crímenes" de los que vengo cometiendo desde hace un tiempo porque sé que le gustan especialmente.
Va por ti, maestro.
Halitosis
Lo maté porque el aliento le olía a rayos.
No se puede figurar usted cómo le olía.
Para que se haga una somera idea, le diré que era como una mezcla diabólica y letal de amoniaco y heces.
Y una será lo que sea, pero también soy de confesión diaria y de olfato delicado.
Mal de ojo
No había acabado de cerrarse la puerta de barrotes detrás de mí, yo todavía con el equipo reglamentario del talego en las manos, cuando al tipo con el que iba a compartir el rancho y la celda durante algunos años le faltó tiempo para hacerme la pregunta:
-Tío ¿a ti por qué te han encerrao?
-Por matar a un ciego.
-¡No jodas, un ciego! -exclamó con sorpresa el colega-. ¿¡Pero qué coño te hizo!?
-Es que me echó mal de ojo -contesté.
-Aaaah -respondió el tipo, vacilante, rematando la conversación-; entonces se comprende.
Imágenes:
Marino: Esther Muntañola.
Confesión: Cristina García Rodero.
BUeno, bueno, bueno, mi vuelta con algo más de tiempo y aterrizo en tu casa con una de mis sonrisas más lozanas.
ResponderEliminarEn lo del olfato, estoy de acuerdo, que malos tragos me da a mi esta nariz que DIos me ha dado.
MUy bueno lo del mal de ojo. Jolines!!!!
Me alegro de volver y ver que estás en plena forma para hacerme reir.
Un placer.
Pues la verdad es que me han encantado estos dos "crímenes" de Marino. Su sentido de la ironía es fino como una aguja, me parece genial.
ResponderEliminarHasta pronto.
Bienvenida de nuevo, Lola, con tu sonrisa de siempre.
ResponderEliminarMe alegro de ser unos de los "culpables" de ella.
Un beso.
Mercedes:me alegro de que te hayan gustado esos "crímenes" irónicos.
ResponderEliminarPero he decirte que son míos.
Han sido mi regalo para Marino en su cumpleaños.
Un beso
Con el del ciego, aún me estoy riendo. ¡Lógica pura!, se le llama a eso.
ResponderEliminarComo siempre, redondos. Aunque con retraso, felicidades a tu amgio Marino. Y a ti por tu derroche de ironía fina.
Un abrazo.
Es que hay ciegos, Antonio, que tienen mucho peligro. Y que dure la risa, que es una de las pocas cosas gratis y que sientan bien.
ResponderEliminarUn abrazo.