Agni, Askar... y, además, "Si no tiene una estufa Superser, está usted fresco."
Qué recuerdos, por asociación, nos vienen junto a estos viejos anuncios que rescatas...
Un abrazo.
P.D.: Elías, al no tener la dirección de ningún correo al que poder dirigirte estas palabras, lo hago por aquí. Si no te importa, puedes borrar esta posdata.
No sé si es problema de mi blog, pero observo que desde ayer ha desaparecido del mismo tu suscripción como seguidor. Y aunque cada uno es muy libre de seguir los blogs que le apetezca y de darse de baja con la misma libertad sin tener que dar por ello ningún tipo de explicación a nadie, me gustaría saber si ello se debe a algún problema de índole técnico o, por el contrario, a algún comentario o entrada que haya dejado en Verbo y Penumbra. Te confieso que por aquello de la íntima vanidad que nos gastamos en más o menos grado los que nos dedicamos a esto de la palabra, me hacía especial ilusión contarte entre los fieles a mi bitácora. Por supuesto, también puedes obviar estas palabras sin más. Ello no será óbice para que yo continúe disfrutando con tus textos y apuntando mi parecer.
(Releo estas palabras y me pregunto cómo sonarán al otro lado y a un destinatario que no me conoce personalmente. Acaso insolentes; algo que no quisieran ser en absoluto.)
Nada de insolente, Antonio: hace unos días tuve problemas con Blogger (no me dejaba crear entradas ni hacer comentarios, y enredando por ver de solucinarlo es posible que te tocara la china de mi torpeza). Creo que ya está arreglado y además te he incluido en mis "sospechosos habituales", léase blogs enlazados. Y esa frase de la Superser, con tu permiso, la incluyo en mi archivo de "El algodón no engaña". Un abrazo.
Uy , me temo que yo no lo recuerdo, o soy una desmemoriada, o algo más joven de lo que son ustedes, lo digo por Elías y por Antonio. Espero que sea una cuestión de juventud, porque falta de memoria a mi edad, tan jovencita, jajajaja. Un abrazo con mucho cariño.
Lola: es por juventud, seguro. Si no te acordarías. Como te acordarás de otras. Yo es que he sido siempre, como decía Borges, muy "memorioso". Abrazos desde el suroeste.
noto un cierto olor a rancio, a la españa del caudillo, al caralsol en las escuelas, a la leche en polvo americana con la que nos dopaban a los niños, al florido pensil ... mucho mejor -sin duda- la entrada de ayer
lempicka: es que no podemos evitar ser hijos de nuestra época. Para nada es añoranza, sino sólo recuerdo. También me acuerdo de todo eso que citas, pero no lo echo de menos en absoluto. Abrazo
Suso: Daban juego los electrodomésticos, rama estufas, en la publicidad. Ahora mismo me acuerdo de otro eslogan de entonces: "Calor blanco, Butaterm". Abrazo.
Elías Moro (Madrid, "cosecha" del 59). Jugaba al baloncesto. Ahora quiere a sus mujeres (4) y a sus amigos, lee lo que le dejan, escribe como puede, baila salsa (aunque lo que le gusta de verdad es el tango). Algún enemigo tendrá también por ahí, no voy a decir que no. Estado actual: escéptico.
TESTIGOS DE CARGO
"Cuando escribes te manchas de ti mismo". Tomás Sánchez Santiago Foto de Guillermo Gallego
Agni, Askar... y, además, "Si no tiene una estufa Superser, está usted fresco."
ResponderEliminarQué recuerdos, por asociación, nos vienen junto a estos viejos anuncios que rescatas...
Un abrazo.
P.D.: Elías, al no tener la dirección de ningún correo al que poder dirigirte estas palabras, lo hago por aquí. Si no te importa, puedes borrar esta posdata.
No sé si es problema de mi blog, pero observo que desde ayer ha desaparecido del mismo tu suscripción como seguidor. Y aunque cada uno es muy libre de seguir los blogs que le apetezca y de darse de baja con la misma libertad sin tener que dar por ello ningún tipo de explicación a nadie, me gustaría saber si ello se debe a algún problema de índole técnico o, por el contrario, a algún comentario o entrada que haya dejado en Verbo y Penumbra. Te confieso que por aquello de la íntima vanidad que nos gastamos en más o menos grado los que nos dedicamos a esto de la palabra, me hacía especial ilusión contarte entre los fieles a mi bitácora. Por supuesto, también puedes obviar estas palabras sin más. Ello no será óbice para que yo continúe disfrutando con tus textos y apuntando mi parecer.
(Releo estas palabras y me pregunto cómo sonarán al otro lado y a un destinatario que no me conoce personalmente. Acaso insolentes; algo que no quisieran ser en absoluto.)
Un abrazo.
Nada de insolente, Antonio: hace unos días tuve problemas con Blogger (no me dejaba crear entradas ni hacer comentarios, y enredando por ver de solucinarlo es posible que te tocara la china de mi torpeza).
ResponderEliminarCreo que ya está arreglado y además te he incluido en mis "sospechosos habituales", léase blogs enlazados.
Y esa frase de la Superser, con tu permiso, la incluyo en mi archivo de "El algodón no engaña".
Un abrazo.
Pues muchas gracias por la aclaración, y por esa inclusión en tus "sospechosos habituales".
ResponderEliminarPor supuesto, la frase es tuya, aunque yo no pueda concederte ningún permiso, al no ser de mi propiedad.
Nuevo abrazo.
Qué recuerdos... Yo era muy niña, pero lo recuerdo. La de veces que hemos dicho después eso de "enchufa el Askar".
ResponderEliminarUn abrazo.
Uy , me temo que yo no lo recuerdo, o soy una desmemoriada, o algo más joven de lo que son ustedes, lo digo por Elías y por Antonio.
ResponderEliminarEspero que sea una cuestión de juventud, porque falta de memoria a mi edad, tan jovencita, jajajaja.
Un abrazo con mucho cariño.
Mercedes: es que esas cantinelas que se aprenden de pequeño no se olvidan nunca.
ResponderEliminarAbrazos.
Lola: es por juventud, seguro. Si no te acordarías. Como te acordarás de otras.
ResponderEliminarYo es que he sido siempre, como decía Borges, muy "memorioso".
Abrazos desde el suroeste.
noto un cierto olor a rancio, a la españa del caudillo, al caralsol en las escuelas, a la leche en polvo americana con la que nos dopaban a los niños, al florido pensil ...
ResponderEliminarmucho mejor -sin duda- la entrada de ayer
El Askar... que grande...
ResponderEliminarun abrazo
Gracias por lo de "farera" en el blog de Antonio del Camino, jajajajaja, la verdad me hizo mucha gracia, eres un genio muy vivaz.
ResponderEliminarUn abrazo y muy buenas noches.
lempicka: es que no podemos evitar ser hijos de nuestra época. Para nada es añoranza, sino sólo recuerdo. También me acuerdo de todo eso que citas, pero no lo echo de menos en absoluto.
ResponderEliminarAbrazo
Suso: Daban juego los electrodomésticos, rama estufas, en la publicidad.
ResponderEliminarAhora mismo me acuerdo de otro eslogan de entonces: "Calor blanco, Butaterm".
Abrazo.
Yo creo, Lola, que habría consenso general en otorgarte ese título, visto tu amor hacia ellos. Yo, desde luego, firmo.
ResponderEliminarAbrazos