Capirote. Especie de aterradora capucha de forma cónica y variados colores que se embuten en la cabeza algunos sujetos para taparse el rostro -acaso por vergüenza- durante cierto rito religioso católico.
Como complemento a tal atentado contra la estética, suelen portar velas encendidas, instrumentos para flagelarse los lomos, arrastrar cadenas por el empedrado, caminar descalzos hasta llagarse los pies… Un espanto.
La primera vez que los vi desfilar de tal guisa -y de cuya espeluznante impresión aún no me he repuesto del todo- entendí al punto lo acertado de la expresión popular, “tonto de capirote”.
Porque hay que estar un poco así para ponerse semejante horror y salir a la calle, no solo como si nada, sino encima haciendo alarde de ello.
Imagen: Cristina Quicler
Entre la literatura sádica y mordaz, y en las antípodas de la oda, situaría esta afilada definición de "capirote", tan aparente hoy que crecen como setas por calles, plazas y avenidas, acompañados (no hay que olvidar) de esos monótonos redobles de tambor que en sí mismos ya son una penitencia.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hombre, algunos son peores, y van a cara descubierta inconscientes de que se la pueden partir por idiotas. Y se la parten.
ResponderEliminarNo sé qué es peor.
Y mira que mueve multitudes.
ResponderEliminarAntonio: Una oda no es, está claro, y a sádico no creo que llegue. Y aunque estas entradas del "diccionario" no pretenden moralinas ni consejos, -son sólo un juego literario-, es evidente que no pueden estar muy alejadas de mi pensamiento.La ironía es su verdera pretensión.
ResponderEliminarDe los tambores hablaremos otro día, que también tienen lo suyo, sí señor.
Un abrazo.
Lo peor, Mercedes, es que estamos rodeados de sujetos así, todos los días,con y sin capirote.
ResponderEliminarY aunque de vez en cuando a alguno le partan la cara, son insistentes como carcomas,se multiplican a cientos comos setas tras las lluvias.
Abrazos
Fe de erratas:
ResponderEliminarDonde dice "sádica" debe decir "satírica" ¡Vaya lapsus de mi parte! (dado el tiempo en el que estamos, me flagelo como penitencia. Por equivocaciones "ansí" empiezan las peleas.) (guiño cómplice).
Un abrazo
Pero no te flageles mucho, Antonio, que el mejor escribano echa un borrón.
ResponderEliminarAbrazo también cómplice.
Jajajaja, que bueno, ahora sé porque mi hija, les decía fantasmas.
ResponderEliminarLa verdad que siempre me pregunté porque tan desagradables a la vista.
La verdad que los látigos, velas, cadenas, me recuerdan a cierta fantasia con x. Pero, ..., lo religioso me tiene algo confundida.
Un abrazo.
Cuánta razón tu hija, Lola.
ResponderEliminarA mí de siempre me han dado un poco de repelús.
Dale un beso de mi parte.
Y otro para ti.