Conocí en persona a Javier Alcaíns hace apenas unos meses, cuando fui a Cáceres a presentar el libro de un amigo común -Javier Pérez Walias-, aunque, como suele decirse, “le tenía echado el ojo” desde hacía años, concretamente desde que publicó su primer libro de poemas “Memoria de los viajes”, creo recordar, no tengo el dato a mano, en el ya lejano 1989. Diez años después reincidió con “Teatro de sombras”. En medio, en el 97, publicó el libro de relatos “La locura y las rosas”, los tres en la Editora Regional de Extremadura, que, dicho sea de paso, publica en todas sus colecciones una serie de títulos que bien merecen que los conozcáis. Y con un gusto editorial tirando a exquisito, y que ya quisieran para sí muchas de esas editoriales privadas que se dan tanto pisto.
Aquí podéis ver algunas muestras de su magnífico trabajo para que se os pongan, como a mí, los dientes largos.
Viene todo esto a cuento porque hace unos días, trasteando en el blog de otro magnífico amigo, Chema Cumbreño, me encontré por sorpresa con esta perla documental, una invitación a una exposición de su obra, donde también se puede apreciar la vena irónica y festiva de Javier, otro rasgo, no menos importante, de su múltiple personalidad:
Con motivo de la exposición titulada SERIE NEGRA (poemas de Luis Alberto de Cuenca ilustrados por Javier Alcaíns), en el Cañadul, el próximo día 27 de mayo a las 20,30 h., están previstos los siguientes festejos:
-Castillo de fuegos artificiales con traca final retumbante, capaz de desintegrar la ropa fina.
-Suelta de una vaquilla para nervioso solaz de mozas y mozos (¡Cuidado, está mocha pero muerde!).
-Bailarinas javanesas y malabaristas de Borneo, engalanados con sedas de colores.
-Sentido recital de cuerda y púa interpretado por “Los versolaris de Nuestra Señora”.
-Sobrecogedor espectáculo de hipnotismo a cargo del mismísimo Doctor Caligari quien, a sus 173 años, sigue poseyendo un poder mental capaz de conseguir que alguien se crea un gato, un cantante melódico y un vendedor de cacerolas, por este orden.
-Desenfadada parodia del anterior, por Pepín Donaire, “Caligarito”, que ya ha desvelado que acudirá con una gallina y una tiza.
-Simpático divertimento humorístico intitulado "Me muero por tus huesos", del dúo cómico Berthold y Greta, acompañados por sus pintureros perritos amaestrados.
-Cata de licores variados de una fuente sin fin.
-Degustación de sabrosos y elaborados canapés.
Sin embargo, puede ser que, tal y como está el patio y siguiendo la moda, haya que hacer algunos recortes finales y se proceda a retirar algunas de las actividades. Eso sí, al menos UNA de entre todas ellas se llevará a cabo.
¿Cuál será?
¡NO OS QUEDÉIS SIN SABERLO!
Coda: Hoy es el día en que no he podido averiguar cuál de esas festivas actividades se llevó a cabo. Si es que tal sucedió.
Hola, Elías
ResponderEliminarSoy Javier Alcaíns. Gracias por la loa.Añado aquí mi dirección como editor, por si alguien está interesado en alguno de estos libros.
www.javiermartinsantos.es
En cuanto a los festejos previstos para la inauguración, todos se cumplieron, como era de esperar. Acudieron miles de cacereños y un grupo de japoneses que pasaba por allí y se quedó a verlos, atónitos ante tal despliegue. Al final, ya cerca del coma etílico, tres japoneses nos regalaron un striptease. Fue inolvidable.
Elías, me alegra mucho que en tu blog puedan algunos encontrar pistas sobre Alcaíns, a quien muchos admiramos. En casa tengo la edición del Polifemo como un tesoro, que me regaló una persona en una ocasión muy especial, sabiendo lo que yo la iba a valorar. Ahora, con el dinero que acabo de cobrar de un curso, me voy a comprar el preciosísimo Sepulcro en Tarquinia, caligrafiado y dibujado por él, (y algún otro libro más). Es otro tesoro contemporáneo, que además no es inalcanzable, en absoluto.
ResponderEliminarComo siempre, Elías, das unas pistas infalibles, y muy de agradecer, en tu blog.
Un abrazo, y feliz fin de semana.
Justicia, isabel, simple y llana justicia para un tío con talento.
ResponderEliminarYo, como sugiero en el artículo, me tengo prometido uno de sus bestiarios.
Un beso.