Un puro maloliente y mordisqueado, una gabardina pringosa que parecía encontrada en un vertedero, un coche pura chatarra, la mirada inconcreta e inquisidora, una placa de poli…
Y esa técnica manida -tan efectiva, sin embargo- de preguntar de improviso y como quien no quiere la cosa, justo antes de abandonar la casa o el escenario del crimen, para pillar en un renuncio al sospechoso y que se delatara él solito como un pardillo con sus titubeos y contradicciones.
(Ahí ya intuíamos todos quien podría ser el más que posible culpable).
Los criminales están de fiesta.
Colombo ha muerto.
Ya salió hace un par de años de que el investigador Colombo estaba internado en un centro de salud.
ResponderEliminarSeguro que donde vaya realizará una buena labor detectivesca.
Saludos
Cómo me gustaba a mí este puñetero Colombo, qué personaje. Claro, que solo había dos cadenas de televisión, así que o Colombo o los reportajes de lo guay que era el jefe del estado. Ahora lo he cambiado por "Mentes criminales". Si es que genio y figura...
ResponderEliminarHasta pronto.
Y a mí que me parece que, pese a Colombo y tantos como él, los criminales siempre están y han estado de fiesta. Me refiero a los de alto standing, claro. Esos a los que nuestro detective solía pillar, como bien dices, en un descuido y, casi siempre, en mansiones de lujo y vestidos con trajes de marca. Vamos, de los que hay tantos rodando por ahí.
ResponderEliminarAbrazos.
Cuando se emitió esa serie por primera vez (Pues tengo entendido que se repuso no hace mucho) yo era muy niño y no puedo recordarla, pero mis padres la han recordado toda la vida y me han creado una especie de Memoria ajena y cierta admiración por esos personajes entrañables que son, hoy día, el referente de los nuevos detectives televisivos.
ResponderEliminarMe alegro de haberme parado hoy en tu Casa... Con permiso, voy a darme una vueltecita por aquí.
Un Abrazo, Elías.
Al hilo de vuestro comentarios, se me viene a la mente ahora que por la misma época de Colombo, ponían en televesión otras tres series de detectives: Kojak (Telly Savalas, siempre con su chupachus de chicle), McCloud (Dennis Weaver, uno que era vaquero y patrullaba a caballo) y Banacek (George Pepard, el que hizo "Desayuno con diamantes" con Audrey Hepburn, y luego degeneró al engendro del Equipo A).
ResponderEliminarY creo que recordar también que los iban alternando en la programación. Pero no estoy muy seguro.
Pepe Da Rosa les dedicó una sevillanas festivas que sonaron mucho durante un tiempo.
Por cierto, que Colombo ha sido el último en morir de los cinco (incluyendo al cantante).
Abrazos.
Me roban un camión de chirimoyas. Aquí el teniente Kojak... Anda que no las he tocado y cantado yo esas sevillanas cuando se nos acababa el repertorio de cantautores y empezaban las "peticiones del oyente".
ResponderEliminarUn abrazo.