Hoy,
no sé a cuento de qué, se me ha venido a la mente aquel cartel, pariente del “Hoy
no se fía, mañana sí”, que colgaba como advertencia para incautos en muchos establecimientos
de antes, preferentemente tabernas y colmados de barrio:
Si
doy, a la ruina voy;
si
fío, aventuro lo que es mío;
si
presto, al pagar ponen mal gesto.
Y
para evitar todo esto,
ni
doy, ni fío ni presto.
Como que ni pintao para los bancos que hemos rescatado entre todos con nuestros dineros y ahora no conceden un crédito a quien lo necesita ni por casualidad.
Imagen: El Roto
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