Celeste
en la desesperación del repudiado por amor,
en el brillo ambicioso del diamante,
en la elegancia sinuosa de los cisnes,
en el cansancio de las enfermedades,
en la traición de los fieles a una causa,
en la vanidad de las orquídeas,
en la lealtad al juramente dado,
en la desgana del guardián de la noche.
en el atardecer solemne de una fuente
ResponderEliminary en lábil escenario del rencor...
Ay, que me gustan. Un beso.
Gracias, Paloma.
ResponderEliminarYa vamos por la mitad de estos "colores".
Espero que los próximos no desmerezcan tu interés por ellos.
Un beso.