Hará cosa de un mes (día arriba, día abajo) recibí en mi buzón un sobre con membrete de la Embajada Española en Lisboa. Tate, me dije. ¿Qué has hecho ahora, Elías?, me dije. Más que nada porque recibir un sobre oficial en casa suele ser para echarse a temblar; aunque la última vez que estuve en Lisboa fue para bailar el tango y no creo yo que, por mal que lo hiciera, sea esto motivo para que meses después tuviera que reprenderme nuestra representación diplomática en la capital lusa. En realidad, no había nada que temer, no iban por ahí los tiros: dentro del sobre venía un precioso libro de poemas (“El encantamiento-Antología poética”, Olifante, 2012) de un poeta portugués del que hasta entonces no había oído hablar: Alberto de Lacerda. Me lo enviaba Luis María Marina (Cáceres, 1978), consejero cultural en dicha embajada, poeta él mismo, y traductor del libro y a quien aún no tengo el gusto de conocer. Algo que si el tiempo y la autoridad no lo impiden tendrá remedio en unas horas, porque esta tarde a las 20:30 se presenta dicho libro en el MEIAC de Badajoz y tengo la intención de plantarme allí para darle un abrazo agradecido.
Oficiará de maestro de ceremonias Antonio Sáez Delgado, también, sí, fíjate tú qué casualidad, poeta, traductor y ensayista, quien acaba de publicar su espléndido “Yo menos yo” en la colección Luna de Poniente, de la editorial de la luna libros.
Quienes tengáis la posibilidad no dejéis de asistir; saldremos de allí más sabios, no me cabe duda.
Os dejo con uno de los poemas en su lengua original y la correspondiente traducción de nuestro joven diplomático:
Scherzo
A fuga e o regresso das palabras
o ir e vir dos barcos os meus tombos
os meus sonhos as famílias mortas
o rei deposto
e eu –
o príncipe vendido
à luz do dia
La fuga y el regreso de las palabras
el vaivén de los barcos mis tumbos
mis sueños las familias muertas
el rey depuesto
y yo –
el príncipe vendido
a la luz del día
(De “Palacio”, 1961)
Pues de ir, por ahora no podré. Pero sí que te leo a ti y a tus invitados.Del poeta Alberto de Lacerda había oído hablar en otro blog (¿Valverde, quizás?: no lo recuerdo), pero veo que el interés por el luso se extiende y creo que con justificada razón.
ResponderEliminarGran abrazo,
Cristián
Elías, a esa misma hora andaré yo también escuchando buena poesía. Seguro que alguna corriente cósmica se mueve entonces por la A5.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Que buena entrada es grato leerte y ver lo que produces en un entorno intelectual poético, saludos.
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