Todo depende del ánimo con el que te encuentres. Ya sabes que el hombre tiene mucha facilidad para ver figuras en las nubes. Y menos mal. Hasta pronto.
Gracias, Antonio. Ese poema es el colofón a mi bestiario. Me pareció bien terminarlo -en una especie de contraste- con el reino vegetal. No me he planteado esa serie que dices, pero, ¿quién sabe?
... la luz en el clarín de la azucena...
ResponderEliminarMe ha encantado, Elías. Intuyo nueva serie, similar a la de los colores. ¿Me equivoco?
Un abrazo.
Todo depende del ánimo con el que te encuentres. Ya sabes que el hombre tiene mucha facilidad para ver figuras en las nubes. Y menos mal.
ResponderEliminarHasta pronto.
Gracias, Antonio.
ResponderEliminarEse poema es el colofón a mi bestiario.
Me pareció bien terminarlo -en una especie de contraste- con el reino vegetal.
No me he planteado esa serie que dices, pero, ¿quién sabe?
Abrazo.
Y ojalá no perdamos nunca esa facilidad, Mercedes.
ResponderEliminarAunque muchas veces nos cueste un mundo.
Un beso.